domingo, 25 de abril de 2010
Portugal tiene una historia del siglo XX marcada por el salazarismo, una dictadura reaccionaria que marcó aún más si cabe la situación de retraso social y económico que vivía el país. Aunque Oliveira Salazar murió en 1970, la dictadura se prolongó aún cuatro años más. Hace justo 36, una sublevación militar de oficiales del ejército y con amplio apoyo popular derrocaron el régimen y dieron paso a un proceso revolucionario que, meses después, desembocó en la celebración de unas elecciones y el establecimiento de un régimen democrático parlamentario. Hace apenas unos meses Historia_a_por_todas trató con cierto detenimiento la conocida como Revolución de los Claveles.
La dictadura salazarista se caracterizó por su carácter autoritario y conservador. Se asentó en el firme apoyo de la alta burguesía, parte de las clases medias, los propietarios rurales y la Iglesia, y la indiferencia resignada de una población que en su mayoría era pobre. Resuelto y fiel aliado de Gran Bretaña, Salazar supo dar una apariencia de democracia formal a un régimen autocrático que asumió algunos elementos del corporativismo fascista. Discreto aliado de Franco, apoyó a éste durante la Guerra Civil.
Como podemos ver a través de los documentales oficiales de la época, Salazar supo dar a su régimen una apariencia de modernización tecnocrática, que apenas podía disimular el gran atraso que sufría el país en comparación con el resto de Europa. Las guerras coloniales, en Ángola, en Mozambique, en Guinea..., debilitaron sobremanera al régimen salazarista si bien la caída de éste fue posterior a la muerte de su fundador y máximo dirigente.
Publicado por Luis Miguel Acosta en 21:07
Etiquetas: franquismo, Historia del Mundo Contemporáneo, Oliveira Salazar, Portugal, revoluçao dos cravos, revolución de los claveles
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario