Hoy, no obstante, nuestro foco de atención se centra en una de ellas: la Stasi de la República Democrática Alemana. ¿Te imaginas un país de poco más de 10 millones de habitantes espiado por casi 300.000 de sus ciudadanos? Espías, muchos. Podía ser el cartero, la vecina del rellano, el compañero soldado, el profesor del instituto, el entrenador de fútbol, la compañera de la oficina... Tras la caída del régimen, su sede fue asaltada. Hoy es posible el acceso a sus gigantescos archivos. Y al hacerlo, miles de alemanes advirtieron la triste realidad de haber sido espiados hasta en sus más elementales actividades. El primero de los siguientes vídeo, real, muestra imágenes grabadas por la Stasi en espacios públicos poco antes de caer el régimen comunista.
jueves, 29 de abril de 2010
Algo que resulta sorprendente en las dictaduras de cualquier signo es la semejanza que presentan sus estructuras represivas. Los nombres los podemos poner y son tantos, y tantos en el siglo XX: la Securitate de la Rumania de Ceaucescu, el KGB soviético, la DINA de Pinochet, la PIDE de Salazar en Portugal, la Gestapo, la Brigada Político-Social del franquismo y más y más... Y a poco que nos descuidemos, también algunas estructuras de control de países "democráticos", a veces, presentan algunas sospechosas semejanzas...
Hoy, no obstante, nuestro foco de atención se centra en una de ellas: la Stasi de la República Democrática Alemana. ¿Te imaginas un país de poco más de 10 millones de habitantes espiado por casi 300.000 de sus ciudadanos? Espías, muchos. Podía ser el cartero, la vecina del rellano, el compañero soldado, el profesor del instituto, el entrenador de fútbol, la compañera de la oficina... Tras la caída del régimen, su sede fue asaltada. Hoy es posible el acceso a sus gigantescos archivos. Y al hacerlo, miles de alemanes advirtieron la triste realidad de haber sido espiados hasta en sus más elementales actividades. El primero de los siguientes vídeo, real, muestra imágenes grabadas por la Stasi en espacios públicos poco antes de caer el régimen comunista.
Hoy, no obstante, nuestro foco de atención se centra en una de ellas: la Stasi de la República Democrática Alemana. ¿Te imaginas un país de poco más de 10 millones de habitantes espiado por casi 300.000 de sus ciudadanos? Espías, muchos. Podía ser el cartero, la vecina del rellano, el compañero soldado, el profesor del instituto, el entrenador de fútbol, la compañera de la oficina... Tras la caída del régimen, su sede fue asaltada. Hoy es posible el acceso a sus gigantescos archivos. Y al hacerlo, miles de alemanes advirtieron la triste realidad de haber sido espiados hasta en sus más elementales actividades. El primero de los siguientes vídeo, real, muestra imágenes grabadas por la Stasi en espacios públicos poco antes de caer el régimen comunista.
Y el inmediatamente anterior se corresponde a una escena de la película La vida de los otros (Henckel-Donnersmack, 2006). Nos aproxima a la vida de un oficial de la Stasi, a la de algunos de sus agentes, algunos oportunistas, otros hombres desnortados que pronto descubren la esencia antinatural de sus actividades... Y claro está, también nos aproxima a la vida de los espiados. La última escena, incomprensible sin haber visto completa la película, resume una vida de quien por dignidad sufrió y perdona...
Publicado por Luis Miguel Acosta en 22:50
Etiquetas: Alemania, DDR, espionaje, Guerra Fría, RDA, República Democrática Alemana, Stasi
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