No, no es Leonardo di Caprio sino Olivier Martinez. No es la archiconocida película Titanic, de James Cameron, sino imágenes de otra película de las muchas que se han hecho sobre el hundimiento del Titanic: La camarera del Titanic (Bigas Luna, 1997). Esta producción europea, dirigida por un español, no es una superproducción con efectos especiales espectaculares, pero es una muy interesante película que nos sitúa bastante bien en el contexto de una época que estudiamos ahora.
Curiosamente, la película tiene algunas conexiones argumentales. Por ejemplo, que el protagonista principal, es un hombre de extracción humilde, un obrero francés que logra un premio para ir al puerto británico de Southampton para ver la partida del barco más famoso del mundo en su viaje inaugural. Azar, accidentalidad... Es la época de las grandes migraciones transoceánicas que coinciden con el fin de la segunda revolución industrial, las rivalidades entre las grandes potencias europeas por el reparto de los Balcanes, el reparto de las colonias de África y Asia. Es momento de esperanzas pero también de temores, meses, pocos meses antes de una catástrofe mucho mayor que la del hundimiento del Titanic: la Gran Guerra, conocida más tarde como la Primera Guerra Mundial, que provocó la muerte sólo en los frentes de batalla de más de 10 millones de soldados.
________________________________________
No hay comentarios:
Publicar un comentario